- Conveniencia o utilidad: ¿qué tan conveniente es la investigación?, ¿para qué va a servir?, ¿en qué va a ayudar?
- Relevancia social: ¿cuál es su trascendencia para la sociedad?, ¿quiénes se beneficiarán con la investigación y cómo?
- Implicaciones prácticas: ¿qué problema ayudará a resolver?
- Valor teórico y metodológico: ¿la investigación llenará algún vacío en los conocimientos sobre el tema?, ¿se podrán generalizar los resultados?, ¿el conocimiento que se obtenga puede ayudar a desarrollar una teoría?, ¿puede servir de base para otra investigación?, ¿la investigación puede ayudar a crear un nuevo instrumento para recolectar o analizar datos?, ¿contribuye a la definición de un nuevo concepto o variable?
- Aportaciones para la enseñanza: ¿la investigación sirve para aprender algo nuevo, reforzar conocimientos o comprender algo?
No es necesario que la justificación abarque todos los criterios, pero recuerda que mientras más amplia sea la justificación será mejor.